martes, 29 de septiembre de 2015

Al final, lo que importa, es la vida que no has malgastado

Cuando te enfrentas a una enfermedad que, hagas lo que hagas, sigue su camino inexorable, te das cuenta de lo verdaderamente valiosa que es la vida y la salud.
Muchas veces perdemos  tiempo y esfuerzo en batallas que no merecen la pena en nuestra vida cotidiana sin darnos cuenta de que al final, lo que importa realmente, es la vida que no has malgastado. El tiempo y las risas que compartimos con la familia y los amigos, los abrazos y los besos que regalamos, el tiempo que dedicamos a hacer el día más agradable a los demás.
Por todo eso, no quiero perder mi un minuto de mi tiempo sin vivir la vida con intensidad, te daré todos los abrazos y todos los besos que no te había dado en todos mis años de existencia. No dejaré de decirte todo lo que te quiero y que estaré a tu lado en lo bueno y en lo malo.
No perderé un minuto buscando el entendimiento con aquellos que no quieren escuchar ni razonar porque sólo tienen tiempo y ojos para sus propios ombligos.
Creo que te lo debo. Es tu legado.


 


Feeling God. Muse. 7 Pounds